En el año 2027 se renovará todo en Michoacán: gubernatura, diputaciones locales y federales y alcaldías, y ante este escenario, el gobierno de Ramírez Bedolla adelantó ya la terminación de su mandato.
Formalmente, aún no llega ni a la mitad de su sexenio, pero decidió bajar la cortina y mejor concentrarse en tres cosas: a) Los negocios multimillonarios que está haciendo con las “obras emblemáticas” de su administración; b) Sus más allegados, iniciaron campañas disfrazadas de acciones de gobierno; c) Tratar de desbarrancar la fuerza política del alcalde de Morelia quien podría sucederlo en 2027.
A) Los negocios multimillonarios que está haciendo con la obra pública y los teleféricos se conocen, lo mismo que el nombre de su socio predilecto y los de su grupo.
B) Las campañas disfrazadas de acciones de gobierno son demasiado evidentes, y aun así no las frenarán. El secretario de finanzas tiene muy poco que decir por la naturaleza misma de su cargo, pero con una comunicación muy forzada le están juntando grupos de personas para que les pueda “explicar cómo cumple con su trabajo de administrar las finanzas públicas”. La secretaria de movilidad trae campaña propia con el teleférico que trata de vender también en eventos juveniles construidos para ello. Y son eventos juveniles, porque esta obra es tan poca atractiva que solo con estudiantes llevados a la fuerza le pueden llenar espacios para generarle boletines de prensa. La secretaria de educación hace lo mismo. Su campaña abierta consiste en regalar “chacharitas” como tenis, argumentando que unos tenis son la respuesta para que Michoacán despegue en calidad educativa. En fin, estos tres perfiles, cercanos al gobernador, están en campañas abiertas con la idea de construirse una imagen para 2027, lo cual costará mucho dinero a los michoacanos.
C) Y el desbarrancar al alcalde de Morelia, también es algo muy evidente. El gobierno estatal decidió lanzar y hacer sus campañas en Morelia porque son la vitrina más grande del estado que maneja muy bien el presidente de la comuna.
En realidad, nada está escrito aún, porque falta demasiado tiempo para las elecciones de 2027, sin embargo, sí valdría la pena saber con qué dinero estarán fondeando los eventos que les arman a estos funcionarios para que se puedan tomar fotos y emitir boletines de prensa. Ese dinero es público y deberían destinarlo en cosas verdaderamente importantes.
¿Cómo cuáles? Yo diría, por ejemplo, pacificar el estado y disminuir el terrorismo que se vive en algunas zonas de Michoacán con tantos atentados y bombas.
*El autor es consultor y capacitador, tiene estudios de doctorado en Política, de maestría en Comunicación, de maestría en Neuromarketing, de maestría en Ciencia Política y de licenciatura en Derecho.
